Estoy a ley de horas para cumplir años y sólo se me ocurre agradecer por todas las bendiciones que he recibido a lo largo de mi vida. Bendiciones que pocas veces aprecio y agradezco, bendiciones que han hecho del mío un universo mágico, sun duda alguna.
Haciendo un poco de análisis en estos días, me he dado cuenta del poder que tienen las velitas del bizcocho cuando las soplas pidiendo un deseo. Todo ha llegado o todo se ha transformado para bien en mi vida, lo que me lleva a pensar que los deseos buenos que vienen del corazón siempre se hacen realidad.
No voy a revelar lo que desearé, pero en verad deseo aprovechar este cumpleaños para arreglar unas cuantas cosas que entorpecen mi caminar en la vida. Son "detalles" que he venido arrastrando desde niña y que ya, pensando yo a sinceridad, no vale la pena tener conmigo. Llegó para mi la hora de reinventarme y cerrar ciclos. El sol brillará con más fuerzas después de esta celebración.
¡Manos a la obra!
1. Ya no más quejas. Hay tanto por agradecer y disfrutar en este mundo, ¿porqué prestarle tanta energía a lo que no fluye? Soltar, vivir, perdonar y olvidar.
2. Paciencia. Supe que tenía un "pequeño inconveniente" con ella cuando comencé a trabajar a los 18 años. De niña me lo decían, pero no me dí cuenta de mi problema hasta que tuve la madurez necesaria para entenderlo. Aunque he mejorado, la impaciencia innata todavía me hace cometer muchos errores, y eso ya se tiene que acabar. No lo tolero.
3. Cuidaré más de mi, de mi salud física y emocional. Prometo ajustarme a un régimen de ejercicios (los que siempre he abandonado a los dos o tres meses) y prometo comer menos disparates.
4. Más tiempo con mi familia. Son siempre amorosos y atentos conmigo. Siempre recibo de mi familia los mejores consejos. Mi trabajo me roba tiempo con ellos y debo cambiar la situación a como de lugar.
5. Los regueros. Por alguna extraña razón no logra mantener organizada mi habitación. O son demasiasdas cosas, o el espacio es muy pequeño o es que simplemente soy muy haragana para mantener mis cosas en orden ¡Ya no más!
6. Preocuparme menos y sonreír más. Así de simple.
7. No pstergar, no postergar, no postergar, no postergar, no postergar. La vida es aquí y ahora.
8. Juzgar menos y tratar de ponerme en los zapatos del otro antes de emitir juicio alguno.
9. Romper la rutina el día menos pensado...Porque sí.
10. Finalemnte convertirme en la mujer que sueño ser, sinmiedo alguno, sin temor alguno.
1 comment:
recuerdate lo que nos dijo la profesional en el almuerzo de claro, no puedes ponerte en el zapato del otro por que no te quedan. eve
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